Por qué votar aunque sea con asquito

Obviamente decoro el título para darle algo de sentido a tener que explicar la perogrullada (desde este lado del río) de exponer la importancia del voto. Lo decoro con un aunque sea con asco porque nadie que le meta la lupa a cualquiera de los candidatos va a encontrar un panorama impoluto, pero el problema está ahí, precisamente, ahí en el asquito. Es como tratar de escoger la miss que mejor resuelva ecuaciones diferenciales, ¿para qué?... al fin y al cabo es imprescindible que todos los candidatos te den algo de asquito, ni siquiera Maria Corina, que pretendió jugar semióticamente con su nombre a la ruleta de la inmaculada sale libre en cuanto nos fijamos que dejó bien ralladas a las ONG´s que pretendan entran como mediadoras sin ser acusadas de plataforma política disfrazada... no supo esperar... Pablo Pérez nos cae buenísimo, a pesar de que el peso le haya ganado el mote de cuerpo de otro, pero carga con la Cruz de Rosales, Barboza... y los partidos tradicionales... que se resumen en un sólo lastre enramado...  Capriles... no tiene ese rollo, es fresco, tiene trayectoria, estuvo preso, pero no enlaza las oraciones, y lo persiguen tantos rumores que uno se pregunta si no habrá un container de papeles en la baticueva que todos imaginan a 300 metros por debajo de Miraflores esperándolo del otro lado de las primarias... ni hablar de Arria, que ha cumplido la excelente labor de mostrarle a cuanto venezolano habla paja sobre la imposibilidad de la reconciliación lo feo que se ve eso cuando lo dice un candidato, y peor aún con una sospechosa plasticidad facial digna de Madame Tussaud que hace sospechar que el verdadero candidato es Carlos Donos... Pero era necesario que hubiera una derecha, más derecha aún que Maria Corina y un Laborista como Medina. Gracias a ellos los periodistas internacionales entienden estas primarias más que una cadena de 9 horas de la cual ya perdimos la memoria y al final ni cuenta. Si, si... todos tienen defectos algunos graves, otros más de chisme de pasilloque comprobados, otros pendejos, todos dan un poco de asquito y menos mal... una persona que pretenda lograr la negociación impostergable de proponer espacios donde rojos, amarillos y azules funcionen sin matarse no puede ser un tipo impoluto... necesitamos alguien que por algún lado de algo de asquito, que haya demostrado un mínimo de burdel... pero que no se haya metido a puta. Por eso votaré este 12 por el que me dé el exacto tipo de asquito que me tiene que dar, la persona que esté interesada en sobrevivir a una aventura no tan distinta de la salida del franquismo o del pinochetismo hacia un nuevo panorama (si, si, estoy consciente que nuestros muertos han sido menos ¿consciente pero no seguro?). Los héroes, las vírgenes, los mesías, los inmortales y resurrectos, esos si me han dado asco del feo toda la vida pues en su nombre se cometen los peores crímenes...  Ah y los que no votan porque no quieren aparecer en una lista aquí les dejo una foto de alguien con bolas...
August Landmesser, un obrero alemán que se negó a hacer el saludo nazi en medio de una multitud de brazos en alto. Y no es que estaba distraído, su historia es real, cautivadora, y jodida... pero no me interesa levantar ningún héroe... al fin y al cabo voto por qué a mi nadie me ha callado sin que yo se lo permita, porque no creo en héroes y porque cada voto en esas primarias es un segundo menos de sueño en las noches del paquidermo (con el perdón de Dumbo) que se pasea todas las noches por un Palacio preguntándose por qué no lo queremos todos mientras se come sanduchitos de nuestro futuro.
La fama recobrada del hombre que se negó a hacer el saludo nazi